martes, 6 de septiembre de 2011

Una ovejita, dos ovejitas, tres mil ovejitas...

Este verano he pasado una larga temporada en el campo. Esa es la razón del tema de mis últimas fotografías: la apicultura, la ganadería, y pronto los insectos y los gatos.
Estos singulares mamíferos (la ovejas) que siempre me llamaron la atención, son los mismos que durante una noche de este verano se colaron en el jardín de mi padre por un agujero de  la reja a comerse la huerta y el resto de plantas y flores que, con tanto esmero, mi padre había estado cuidando.
Y fue así como a las 3 de la mañana me desperté escuchando los cencerros debajo de la ventana de mi habitación y tuve que salir en ropa interior a espantar a estas bestias aborregadas a base de gritos y palmadas hasta que la última de ellas salió por el agujero por dónde habían entrado.
Fue como para grabar un vídeo y colgarlo en youtube.
Después de eso, decidí que merecían unas fotografías..XD















1 comentario:

  1. Beeeee!!! Son chulíssimes! La de l'ovella de la taca a l'ull és genial, les altres també :) Besotes germaneta!

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